Todos los días tomamos decisiones que afectan al mundo que nos rodea. Algunas son grandes, como la carrera que seguimos o la decisión de tener hijos; otras son pequeñas, como el trato que damos a las personas que vemos en nuestro día a día. Sin embargo, todas y cada una de las decisiones que tomamos tienen el poder de hacer del mundo un lugar mejor o peor. Entonces, ¿cómo podemos asegurarnos de que siempre hacemos del mundo un lugar un poco mejor de como lo encontramos?
Revisemos algunas formas de asegurarnos de siempre hacer del mundo un lugar un poco mejor de como lo encontramos:
Aporta tu tiempo y tu talento como voluntario. Ya sea ayudando en un comedor social de tu localidad o dando clases particulares a los niños después del colegio, ser voluntario es una de las mejores maneras de lograr un impacto positivo en tu comunidad. Y hay muchas oportunidades de hacerlo sin importar lo mucho o poco que puedas dedicar; incluso una hora o dos marcan la diferencia.
Practica actos de generosidad sin pensarlo dos veces. Algo tan sencillo como pagar el café de alguien o abrirle la puerta a un desconocido puede alegrar el día de alguien y, a su vez, hacer que sea más probable que esa persona también sea generosa hacia los demás. ¿Quién sabe? Tu acto de generosidad podría iniciar una reacción en cadena que acabe mejorando al mundo.
Recicla y reduce tu huella de carbono. Todos los días tomamos decisiones sobre qué hacer con nuestra basura. Y todos los días, la mayoría de nosotros elegimos simplemente tirar todo a la basura sin pensarlo mucho. Pero si todos nos esforzáramos por reciclar y reducir nuestros residuos, podríamos hacer una gran diferencia en la cantidad de contaminación y basura de todo el mundo. Así que la próxima vez que estés a punto de tirar esa lata de gaseosa a la basura, considera reciclarla: es algo fácil y marca la diferencia.
Haz una donación. Cuando se trata de donar dinero, muchos piensan que deben tener mucho dinero extra para poder hacer una diferencia en el mundo. ¡Pero no es así en absoluto! Incluso si sólo tienes un dólar para donar, ese dólar puede ayudar mucho a una buena causa. Así que si estás buscando una manera de hacer que tu dinero cambie la vida de los demás, considera la posibilidad de donar aunque sea una pequeña cantidad. Nunca se sabe qué impacto puede tener tu donación.
Cada uno de nosotros tiene en sus manos el poder de hacer del mundo un lugar mejor, pero depende del uso que hagamos de ese poder. Si somos conscientes de nuestras decisiones y tomamos iniciativas para ser más compasivos y responsables con el medio ambiente, podemos hacer del mundo un lugar un poco mejor de como lo encontramos. ¡Hagamos nuestra parte para que este mundo sea un lugar mejor para todos!
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